Pareja de Gilroy acusada de ‘esclavizar’ a hombre, forzarlo a vivir y trabajar en una tienda sin pagarle
GILROY, Calif. (KMUV) Una pareja de Gilroy está enfrentando cargos de tráfico humano tras presuntamente encerrar a un hombre en una licorería, forzarlo a trabajar 15 horas diarias y por hacerlo dormir en un almacén.
La Fiscalía del Condado de Santa Clara dijo que el hombre fue forzado a bañarse en una cubeta para trapeador y nunca recibió un pago por su trabajo.
Los sospechosos son Amarjit y Balwinder Mann, propietarios de M&M Liquors ubicada por Westwood Drive. Investigadores estiman que la pareja robó más de $150,000 en salario de la víctima y otros tres empleados de la licorería.
La investigación comenzó en febrero, cuando una inspección por parte del Control de Bebidas Alcohólicas los llevó a descubrir a la víctima. Un agente encontró al hombre, quien aparentemente vivía en un almacén, y lo identificaron como una bandera roja por tráfico humano. Enel cuarto, el agente supuestamente encontró un colchón delgado sobre cajas de leche, un escritorio de oficina con ropa doblada en los cajones, sartenes y ollas a un lado del escritorio, y un fregadero para trapeadores con una botella de shampoo.
La Fiscalía agregó que investigadores descubrieron que la víctima había volado desde India en 2019, y esperaba viajar por Estados Unidos con la pareja, pero en vez de que esto ocurriera, la pareja presuntamente tomó su dinero y su pasaporte. Después, ellos lo habrían hecho trabajar sin pagarle y lo encerraban en la tienda durante las noches.
Investigadores creen que la pareja reclutaba a trabajadores de India y les prometían viajar e independencia financiera.
"La esclavitud oficialmente fue abolida en 1865", dijo el Fiscal Jeff Rosen. "Trágicamente, estamos viendo ejemplos de esto en 2020. Mi Oficina enjuiciará con el peso máximo de la ley a quien practique este tipo de explotación criminal e inhumana".
Dos otros hombres que trabajaban en la tienda y otro que trabajaba en el supermercado al otro lado de la calle, les dijeron a investigadores que trabajaron "horas maratónicas" con poca paga, y uno de ellos dijo que no estaba al tanto de que existía un salario mínimo.
La pareja enfrenta cargos que incluyen, tráfico humano, intimidación de testigos y robo de salarios.