De Pájaro a Harvard: Una joven supera adversidades y es aceptada en una universidad privada de elite  

SALINAS, California, (KMUV-TV) - De acuerdo con los registros de la Universidad de Harvard, la tasa de admisión es del 4%, tan solo el año pasado se enviaron solo 29 cartas de aceptación. Este año, entre esas invitaciones estuvo Alexandra Arguello, una joven residente de Pájaro que luchó contra muchas adversidades durante el desastre que desplazó a miles de familias en esa comunidad.  

La primera vez que Alexandra tuvo que enfrentarse a una evacuación fue durante su primer año en la preparatoria, cuando su arrendador les pidió que abandonaran su casa de Salinas repentinamente. Juana, la madre de Alexandra, buscó vivienda durante varios meses, durante todo este tiempo, se quedaron sin hogar durmiendo en su coche.

Sin embargo, Alexandra siguió estudiando y permaneció en la escuela hasta que por fin encontraron una casa en el pueblo de Pájaro. La vida de Alexandra volvió a la normalidad durante unos meses, hasta que estalló la pandemia de COVID-19, que inició una nueva era de educación a distancia, distanciamiento social y aislamiento. 

"A pesar de la pandemia y de tener que estudiar en casa, sus profesores se sorprendieron de que las notas de Alexandra nunca bajaran, de hecho, incluso recibió un premio por tener las notas más altas de su clase", cuenta Juana, la madre de Alexandra. 

Tras unos años de aislamiento, se reanudaron las clases presenciales, lo que permitió a Alexandra volver a la escuela. El único problema era que ahora tendría que recorrer más de 20 millas para llegar a la escuela, esto se debe a que Alexandra vivía en la comunidad de Pájaro, pero asistía a la preparatoria Everett Álvarez High en Salinas.

El 11 de marzo, el dique del río Pájaro colapso, inundando la comunidad. A mitad de la noche, Alexandra y su madre corrieron a buscar los refugios más cercanos. Sin embargo, todos estaban ya llenos.  Sin un lugar donde quedarse, no tuvieron más remedio que dormir en su auto. El único refugio disponible que encontraron estaba en King City, y tuvieron nuevamente que viajar largas distancias para llegar a la escuela todos los días. No fue hasta un mes después, cuando por fin pudieron reincorporarse a la comunidad y volver a su casa en Pájaro.

"Bueno, yo sabía que la educación era mi prioridad y sabía que era lo único que podía ayudarme a salir adelante, así que me centré en eso en lugar de en todas las cosas malas que estaban pasando en la comunidad", dijo Alexandra Arguello. 

Algunos estudiantes se preguntaban por qué seguía asistiendo a una escuela tan alejada de su comunidad. Ella explicó que era porque el programa Puente, al que pertenecía, era único y, como inmigrantes de bajos ingresos, no podían dejar escapar esa oportunidad.

Alexandra dice que siempre ha tenido una mentalidad positiva, vio el sacrificio y las condiciones de vida de su madre y sabía que pagar la escuela sería muy caro.

"Alexandra me dijo desde pequeña que no tenía que preocuparme por pagar la universidad porque le iba a ir bien en los estudios y que encontraría la manera de conseguir ayudas, que su educación estaría pagada", cuenta Juana. 

Aunque su madre se viajaba todos los días para llevar a Alexandra a la escuela, ella dice que los resultados de sus notas y el haber sido aceptada en la Universidad de Harvard han sido su mayor recompensa.