Nios con padres deportados demandan a Trump
Tambien los niños llevan a los tribunales al presidente de Estados Unidos.
Un grupo de 10 menores cuyos padres han sido deportados o están amenazados con una repatriación demandaron al presidente Donald Trump en un tribunal federal de Miami por daños y privaciones “graves e irreparables” al ser separados de sus familias.
Los demandantes, en su gran mayoría hispanos de entre seis y 18 años, solicitaron la implementación de una acción diferida que les permita permanecer con sus padres en Estados Unidos.
“Este tribunal debería ordenarle al presidente de Estados Unidos que frene la deportación de todos los extranjeros que son padres de niños estadounidenses”, solicita la demanda de 34 páginas. “El presidente debería dejar de implementar leyes que son discriminatorias”.
La demanda fue presentada el jueves por la activista de inmigración Nora Sándigo, designada por los padres como guardiana legal de sus hijos menores de edad. Se trata de una acción colectiva en la que los demandantes reclaman en nombre de todos los niños del país que atraviesan su misma situación.
El reclamo tiene lugar en momentos en que Trump es fuertemente criticado por sus políticas de inmigración de mano dura que han dejado en el limbo a cientos de miles de inmigrantes que durante decadas permanecieron en el país de manera legal. Durante su gobierno se han incrementado más de un 40% las detenciones de inmigrantes y las deportaciones de extranjeros detenidos en territorio estadounidense ascendieron un 37%.
El Congreso intenta en estos días definir la suerte de 800.000 jóvenes traídos a Estados Unidos sin autorización cuando eran niños -conocidos como “dreamers”- y que gozaban de una protección de la deportación concedida durante el gobierno de Barack Obama. Trump canceló ese programa en septiembre.
La Casa Blanca no respondió de manera inmediata los pedidos de comentarios de The Associated Press.
Entre los niños demandantes hay algunos cuyos dos padres han sido deportados, otros en proceso de deportación y con TPS, un estatus temporal de residencia recientemente cancelado para los haitianos, salvadoreños y nicaragüenses.
Decenas de demandas relacionadas con temas de inmigración han sido presentadas en los últimos meses en los tribunales de todo el país. Recientemente un fallo judicial bloqueó temporalmente la decisión de Trump de poner fin al DACA, el programa que protegía a los jóvenes.
Sándigo, quien tiene una fundación y ayuda a los inmigrantes con comida y alimentos, es guardiana de cerca de 1.250 niños cuyos padres han sido deportados o temen ser deportados.
“Como cualquier niño americano tienen derecho a mantener su familia unida, a gozar del beneficio de tener a sus padres”, expresó Sándigo a AP, refiriendose a los demandantes.
“Se los trata como extranjeros y la realidad es que son niños americanos”, dijo el abogado Alfonso Oviedo Reyes, quien presentó la demanda.
En el documento los niños alegan que si sus padres son deportados “sufren daños y privaciones excepcionales, extremadamente inusuales, irreversibles, graves e irreparables” que incluyen la posibilidad de que ellos mismos sean forzados a salir del país en el que nacieron.
Pero incluso si los niños permanecen en Estados Unidos, agrega la demanda, “sufrirán la profunda separación de sus padres y de su familia”.
Cuando quedan solos en Estados Unidos porque sus padres han sido deportados los niños son considerados “abandonados” y las autoridades les encuentran familias sustitutas y los entregan en adopción, “rompiendo los lazos legales y las relaciones con sus padres naturales”.